Calidad del suelo

Calidad del suelo

logoInformación general

La calidad de un suelo se define como la capacidad que éste tiene para funcionar de manera que permita la sostenibilidad ambiental y de la producción vegetal. A través del mantenimiento y del mejoramiento de la calidad del suelo evaluado a partir de un mínimo de datos que corresponden a diversas propiedades edáficas (físicas, químicas y biológicas), se consigue generar una clara discriminación entre los sistemas de uso o manejo evaluados, y alcanzar la suficiente sensibilidad para medir condiciones de estrés asociadas con intervenciones antrópicas, fácilmente y en un corto período de tiempo.

Debido a que la pérdida de calidad está asociada con la alteración de numerosos procesos realizados por los microorganismos edáficos, se han propuesto como indicadores válidos para diagnosticar el impacto generado por cambios en el uso del suelo y en la restauración de ecosistemas. De esta manera, mediante la evaluación de su densidad, actividad o estructura-composición se puede conocer si los actuales sistemas de manejo conservan, mejoran o degradan el suelo.

logoLíneas de investigación

Bioquímica del suelo asociada a la actividad enzimática dependiente del ciclo de nutrientes

Identificación de moléculas que denoten el estrés por interacción de patógeno-planta derivados de exudados radiculares. Cuantificación de actividad glucosidasa, deshidrogenasa, catalasa, fosfatasa, ureasa, sulfatasa.

Calidad del suelo

Entendida como la aptitud productiva y el grado de fertilidad del suelo. Para ello analizamos todos los indicadores físico químicos de calidad: textura, pH, C.E., materia orgánica, nutrientes solubles y de cambio, micronutrientes y macronutrientes.

Incorporación de enmiendas orgánicas, calizas, fertilizantes y bioestimulantes/agentes de control biológico

Con una posterior evaluación de la producción y la calidad del suelo.

Implementación de estrategias de mejora

Ventajas e inconvenientes agronómicos y ambientales de las diferentes estrategias de cultivo (rotaciones, modo de siembra) y del manejo del suelo (laboreo de conservación).