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El envasado activo, una nueva tecnología postcosecha para mejorar la calidad de fruta de hueso

El envasado activo, una nueva tecnología postcosecha para mejorar la calidad de fruta de hueso


Num. Expediente: INI1301000/1
Origen de la financiación: CICYTEX
Duración: 2013 - 2014
Centro y Departamento: Instituto Tecnológico Agroalimentario de Extremadura - Vegetales
Investigador Principal: Velardo Micharet, Belén

Resumen
Envasado activo de Cerezas ‘Sweetheart’ con atmósfera modificada

El objetivo de este proyecto es estudiar el efecto del envasado activo en la mejora de la calidad postcosecha de fruta de hueso producida en Extremadura. Para ello, se contempla trabajar con los cultivares de mayor interés comercial para el sector frutícola y comparar la vida comercial de los mismos bajo condiciones de envasado comercial convencional frente al envasado activo.
El envasado activo consiste en la incorporación de aditivos (aceites esenciales naturales en la mayoría de los casos) con propiedades antioxidantes y/o antimicrobianas en la matriz del envase, con el objetivo de mantener las características iniciales del alimento y mejorar la seguridad del consumidor.
La vida comercial de la fruta objeto de estudio vendrá determinada por la evolución de las características físico-químicas, sensoriales y microbiológicas durante el almacenamiento refrigerado (simulando el periodo de transporte a mercados lejanos de exportación) y de vida útil (simulando el periodo de comercialización y consumo). 



Conclusiones

1 –En melocotón 'Largue White' con diferentes concentraciones de esencia (0, 25, 50, 75 y 100%) y en condiciones de maduración acelerada (5 días a 20ºC y 66% de humedad relativa),  se observó que el producto no alteraba la atmósfera modificada y que se reducía la incidencia de mohos en un 40%. No obstante, en su formulación actual (100%) podría tener efectos fitotóxicos.

2 -En cerezas 'Sweet Heart' envasadas en atmósfera modificada durante el almacenamiento postcosecha en refrigeración (3ºC durante 20, 25 y 32 días) y de vida útil (1 día a 20ºC), el envasado activo no alteró la atmósfera ni la valoración sensorial de las cerezas y redujo la incidencia de mohos en todos los tiempos de ensayo. A diferencia del melocotón, no se encontraron signos de fitotoxicidad en los frutos, y la concentración de producto más efectiva en atenuar las podredumbres fue del 100%.

3 -En general, la efectividad del envasado activo ha sido diferente en función de la fruta estudiada y se prevee que pueda verse afectada por el cultivar, ya que cada uno puede presentar diferente sensibilidad a los microorganismos alterantes. Por tanto, es necesario estudiar el espectro de acción del producto sobre la microbiota de la fruta producida en Extremadura y ampliar el estudio de dicho compuesto a otras frutas no estudiadas hasta ahora. como ciruela y nectarina.

4 -El envasado activo, como única tecnología postcosecha para evitar las podredumbres en fruta de hueso, no se recomienda ya que no se consigue un control del 100%, sino que ralentiza la aparición de podredumbres o reduce su incidencia a determinadas dosis de producto. En las condiciones de comercialización de la fruta destinada a exportación, el envasado en atmósfera modificada puede dar lugar a una concentración del producto que puede resultar fitotóxico para el fruto y/o alterar las características organolépticas del mismo.