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CICYTEX y el Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura elaboran un manual informativo sobre las plagas del trigo

CICYTEX y el Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura elaboran un manual informativo sobre las plagas del trigo


29 abril 2019

         

CICYTEX y el Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura elaboran un manual informativo sobre las plagas del trigo

29 abril 2019

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha editado, dentro de su colección Hojas Divulgadoras, un manual informativo dedicado al control y manejo de las plagas del trigo: plaga del mosquito y tronchaespigas. Estas plagas provocan pérdidas económicas a los agricultores. La publicación, editada en papel, ha sido elaborada por el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEX) y el Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura

En esta hoja divulgadora se define en qué consisten las plagas del mosquito del trigo (Mayetiola destructor)   y tronchaespigas (Calamobius filum). Asimismo, analiza y expone los controles disponibles para combatir estas plagas. Tradicionalmente, los agricultores han utilizado tratamientos insecticidas y quemado de los rastrojos, procedimientos contaminantes del medio ambiente. En esta hoja divulgadora se informa que los experimentos realizados sobre el quemado del rastrojo han demostrado que su eficacia es muy reducida en la prevención de estas plagas. Para sustituir estos procedimientos, este manual  recoge un conjunto de buenas prácticas mediante las cuales se pueden evitar estas plagas. También se indican los tratamientos químicos autorizados contra el tronchaespigas.

En el apartado de buenas prácticas se propone el enterrado de rastrojo una vez recogida la cosecha a fin de que los insectos que afectaron al cultivo no puedan volver a salir y propagar la plaga. La fecha más propicia es finales de agosto. También se aconseja la rotación de cultivos para no sembrar trigo dos años consecutivos en la misma parcela. En las investigaciones realizadas en Extremadura para determinar la posible relación entra la alternativa de cultivo y la gravedad de la plaga, se aprecia que a medida que se repite el cultivo de trigo, se agrava el parasitismo del insecto.

En cuanto a la plaga del mosquito, hay que realizar la siembra a mediados de otoño para evitar que el trigo no esté sembrado o nacido, cuando aparezcan los mosquitos con las primeras lluvias. De esta forma se evita el desarrollo de la primera generación de Mayetiola (plaga del mosquito). Entre las labores del cultivo, el aricado (arar muy superficialmente) tiene un efecto positivo contra dicha plaga, el momento adecuado es la fase de ahijado. El aricado es una antigua práctica que se realizaba mediante rastras de púas para controlar las malas hierbas cuando el uso de herbicidas no era usual.

En relación a los tratamientos químicos contra el tronchaespigas, el manual especifica qué materias activas están autorizadas. En la actualidad, no hay registrado ningún fitosanitario contra el mosquito del trigo.

 

Síntomas de la plaga del mosquito

El mosquito que provoca esta plaga tiene un gran parecido con el mosquito común. El primer síntoma se produce al final del otoño y comienzo del invierno con la aparición de rodales de plantas con poco vigor, o incluso muertas, en los sembrados de trigo. Cuando las primaveras son “largas” y húmedas se produce otro síntoma: el peso de la espiga y el tallo debilitado por el parasitismo del mosquito provocan el rompimiento de la caña por la base.

 

 

 

Síntomas de tronchaespigas

El Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura registró en 2010 las primeras consultas relacionadas con daños producidos en el cereal correspondientes al parasitismo de calamobius filum, insecto al que los agricultores denominan “tronchaespigas” o “aguijonegro”. Según refleja la publicación, los daños principales consisten en tronchamientos de la espiga con posterior caída al suelo, quedando la caña sin espiga, lo que imposibilita la recogida con cosechadora. Respecto a su morfología, señalan que los adultos son de color negro-grisáceo, que tienen el cuerpo alargado y estrecho, con una longitud de 5 a 10 mm y con antenas largas y uniformes, oscilando entre los 12 y 26 mm, diferenciando esa longitud los machos de las hembras.

Los autores de este trabajo, publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, son: José del Moral, Ángel Mejías, Modesto Senero y Javier Pérez Ross del Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEX) y Juan de D. del Pozo y  Beatriz Pérez por parte del Servicio de Sanidad Vegetal, ambos centros pertenecientes a la Junta de Extremadura.


El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha editado, dentro de su colección Hojas Divulgadoras, un manual informativo dedicado al control y manejo de las plagas del trigo: plaga del mosquito y tronchaespigas. Estas plagas provocan pérdidas económicas a los agricultores. La publicación, editada en papel, ha sido elaborada por el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEX) y el Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura

En esta hoja divulgadora se define en qué consisten las plagas del mosquito del trigo (Mayetiola destructor)   y tronchaespigas (Calamobius filum). Asimismo, analiza y expone los controles disponibles para combatir estas plagas. Tradicionalmente, los agricultores han utilizado tratamientos insecticidas y quemado de los rastrojos, procedimientos contaminantes del medio ambiente. En esta hoja divulgadora se informa que los experimentos realizados sobre el quemado del rastrojo han demostrado que su eficacia es muy reducida en la prevención de estas plagas. Para sustituir estos procedimientos, este manual  recoge un conjunto de buenas prácticas mediante las cuales se pueden evitar estas plagas. También se indican los tratamientos químicos autorizados contra el tronchaespigas.

En el apartado de buenas prácticas se propone el enterrado de rastrojo una vez recogida la cosecha a fin de que los insectos que afectaron al cultivo no puedan volver a salir y propagar la plaga. La fecha más propicia es finales de agosto. También se aconseja la rotación de cultivos para no sembrar trigo dos años consecutivos en la misma parcela. En las investigaciones realizadas en Extremadura para determinar la posible relación entra la alternativa de cultivo y la gravedad de la plaga, se aprecia que a medida que se repite el cultivo de trigo, se agrava el parasitismo del insecto.

En cuanto a la plaga del mosquito, hay que realizar la siembra a mediados de otoño para evitar que el trigo no esté sembrado o nacido, cuando aparezcan los mosquitos con las primeras lluvias. De esta forma se evita el desarrollo de la primera generación de Mayetiola (plaga del mosquito). Entre las labores del cultivo, el aricado (arar muy superficialmente) tiene un efecto positivo contra dicha plaga, el momento adecuado es la fase de ahijado. El aricado es una antigua práctica que se realizaba mediante rastras de púas para controlar las malas hierbas cuando el uso de herbicidas no era usual.

En relación a los tratamientos químicos contra el tronchaespigas, el manual especifica qué materias activas están autorizadas. En la actualidad, no hay registrado ningún fitosanitario contra el mosquito del trigo.

 

Síntomas de la plaga del mosquito

El mosquito que provoca esta plaga tiene un gran parecido con el mosquito común. El primer síntoma se produce al final del otoño y comienzo del invierno con la aparición de rodales de plantas con poco vigor, o incluso muertas, en los sembrados de trigo. Cuando las primaveras son “largas” y húmedas se produce otro síntoma: el peso de la espiga y el tallo debilitado por el parasitismo del mosquito provocan el rompimiento de la caña por la base.

 

 

 

Síntomas de tronchaespigas

El Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Extremadura registró en 2010 las primeras consultas relacionadas con daños producidos en el cereal correspondientes al parasitismo de calamobius filum, insecto al que los agricultores denominan “tronchaespigas” o “aguijonegro”. Según refleja la publicación, los daños principales consisten en tronchamientos de la espiga con posterior caída al suelo, quedando la caña sin espiga, lo que imposibilita la recogida con cosechadora. Respecto a su morfología, señalan que los adultos son de color negro-grisáceo, que tienen el cuerpo alargado y estrecho, con una longitud de 5 a 10 mm y con antenas largas y uniformes, oscilando entre los 12 y 26 mm, diferenciando esa longitud los machos de las hembras.

Los autores de este trabajo, publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, son: José del Moral, Ángel Mejías, Modesto Senero y Javier Pérez Ross del Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEX) y Juan de D. del Pozo y  Beatriz Pérez por parte del Servicio de Sanidad Vegetal, ambos centros pertenecientes a la Junta de Extremadura.

Categorías:  Fitopatologia